pesar de que no soy un experto esquiador (me defiendo en las azules y me atrevo con pocas rojas) la estación de esquí de Font Romeu es una de mis preferidas.
Se encuentra un poco más allá de Puigcerdá, en la zona conocida como la Cerdaña Francesa. La distancia desde Barcelona es muy corta, y sin caravana en un par de horitas te plantas allí, eso sí, si no hay tráfico, porqué si hay tráfico te puedes pasar 4 horas tranquilamente.
En la zona hay varias estaciones de esquí españolas (a destacar Masella y La Molina) aunque estas, y debido a su proximidad a Barcelona acostumbran a estar muy masificadas. Dicha masificación resulta engorrosa, tanto para los que saben esquiar como para los que no saben y tienen miedo a los atropellos.Por eso, la alternativa de Font Romeu (tan solo a unos 20 minutos en coche de las otras estaciones) es muy válida. Las razones que la hacen más que atractiva son las siguientes:
1- No hay tanta masificación como en las estaciones catalanas. Eso es beneficioso no solo para esquiar sino que también lo es para aparcar.
2- Es mucho más barato. La razón, intuyo que es porqué extrañamente, La Cerdaña catalana es una de las zonas más ricas del país (por el boom del esquí, que parece que los Cayenes los regalan) y en cambio la Cerdaña Francesa debe ser de las zonas más pobres de Francia (supongo que por su lejanía a grandes ciudades, y que para esquiar ya tienen los alpes). Eso hace que mientras en La Molina el forfait sea de 33€ en Font Romeu es de 27€
Además, alquilar un equipo de esquí (botas, esquís y palos) cuesta en la zona catalana 15€, en Francia te cuesta tan solo 7€.
Eso ayuda, sobre todo teniendo en cuenta lo caro que es esquiar.
3- Para los principiantes sobran pistas azules y verdes para pasartelo más que bien :) Parece ser que para los que saben un poco más puede que las pistas negras y rojas se queden un poco cortas. De todos modos creo que eso solo le pasa a gente que tiene un nivel muy alto, no se. Además hay la opción de conectar con la estación de Pyrinees 2000, lo cual agranda el abanico de pistas por las que puedes pasar.
El paisaje, como siempre que se esquía es envidiable, y te dan ganas de dejar la ciudad y ponerte a vivir por las montañas... aunque eso creo que es dificil!
Una cosa sí que es verdad, y es que lo de los precios se escoña cuando te tomas una cocacola y un agua mineral, ya que todo esto te cuesta 4,5€.
En resumen, una opción muy buena, sobretodo para aquellos que van normalmente a la Masella o La Molina, pero eso sí, si tenías pensado aprender con monitor, mejor que antes aprendas francés, que aunque está cerca de la frontera y entienden muchos el español, ellos hablan francés.
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